Natillas de vainilla con salsa de Toffee

No todo van a ser postres complicados, así que hoy os traigo un postre sencillo y de toda la vida, unas natillas de vainilla, pero con un toque diferente y especial, ya que están presentadas con salsa de toffee. Y digo yo, ¿a quien no le gustan unas natillas caseras?, creo que es el postre que más nos recuerda a la infancia.

No sé vuestras madres, pero recuerdo que mi madre nos las hacía muy a menudo, era el postre de muchos domingos en casa. Recuerdo también que las natillas fueron el primer postre que yo aprendí y hice por mi cuenta (tenía 12 años).
Tengo que reconocer que me han gustado y me siguen gustando, y mira que hago postres de toda clase, pero si hay natillas en la nevera no me resisto, hasta que no se acaban no paro de dar "vueltas" por la cocina.

Ahora que tengo a mis niñas, se las hago siempre que puedo.

Como la semana pasada hice la tarta Pavlova y también unos macarons (que ya os traeré la semana que viene), me sobraron varias yemas, pues para aprovecharlas hice estas natillas. Para darle un poco de gracia las presenté con salsa de toffee, nata montada y unas grosellas. Y la verdad quedaron de lo más monas, incluso diría que dignas de cualquier mesa festiva, ¿o no?

Animaros a prepararlas, son un postre sencillo, fácil de hacer y muy, muy rico. Y anda que no hay diferencia entre unas natillas caseras y unas del súper.

Receta

Natillas de vainilla con salsa de Toffee

Ingredientes para las Natillas de vainilla:

1 litro de leche (900ml + 100ml)
1 vaina de vainilla

6 yemas de huevo L

120 - 150 gr de azúcar, a gusto

30 gr de maizena

Preparación:

• Abrir la vaina de vainilla con un cuchillo bien afilado y sacar las semillas. 
• En un cazo verter 900ml de leche, añadir las semillas de vainilla y la vaina de vainilla partida. Calentar la leche a fuego medio, casi hasta el punto de ebullición y retirar del fuego. Dejar reposar fuera del fuego al menos 1/2 hora, para que se vaya aromatizando (infusionando). Cuanto más tiempo esté reposando la leche, más aroma a vainilla tendrán las natillas.
• Batir con la batidora eléctrica o con unas varillas de mano las yemas con el azúcar, hasta que el azúcar se haya disuelto y la mezcla esté espesa y cremosa. Mezclar la maizena con los restantes 100ml de leche, procurando que no quede ni un grumo. Añadir la mezcla de la maizena y la leche a los huevos batidos, y batir un poco hasta que se integre todo. Para un trabajo más perfecto y evitar grumos en la preparación, pasar la mezcla por un colador.
• Colar la leche infusionada y volver a calentarla de nuevo. Cuando empiece a hervir apartarla del fuego y añadir la mezcla de la maicena, las yemas y el azúcar y volver a llevar de nuevo al fuego. Cocinar a fuego medio, removiendo constantemente (sin parar) con unas varillas de mano hasta que espese, para evitar que se formen grumos. No hay que dejar que hierva en ningún momento, se tiene que cocinar y espesar poco a poco, pero sin dejar que hierva. Cuando la crema haya espesado ligeramente, retirarla del fuego y continuar removiendo medio minuto más. Es muy importante no dejar de remover, pues puede llegar a quemarse o pegarse al cazo.
• Verter la natillas en unas copas, cuencos o cazuelitas. Dejar enfriar a temperatura ambiente y después reservar en la nevera. Para evitar que se forme costra tapar con un film transparente.
• Antes de servir decorar con salsa de toffee, un copete de nata montada y unas grosellas u otro fruto rojo.

Ingredientes para la salsa de Toffee:

100 gr de azúcar

50 gr de agua

200 ml de nata liquida para montar (mínimo 35% de M.G.)

Preparación:

• Poner en un cazo el agua y el azúcar y mover la mezcla con una cucharada para ayudar que el azúcar se disuelva antes de poner el cazo al fuego.
• Llevar la mezcla al fuego y dejar que vaya evaporando el agua, que burbujee y que tome ese color dorado del caramelo.
• Cuando el caramelo esté dorado apartarlo del fuego. Dejarlo fuera del fuego durante 1 minuto para que pierda un poco de calor.
• Luego añadir la nata a temperatura ambiente o un poco templada, en tres tandas e ir removiendo con una cuchara de madera. ¡Ojo! Aquí hay que tener mucho cuidado, porque al haber contraste de temperaturas la nata subirá y nos podemos quemar. 
• Volver a poner el cazo al fuego y cocinar la salsa toffee unos 4 - 5 minutos a fuego medio, para que se concentre un poco. Remover de vez en cuando con una cuchara de madera, para ayudar que se integre todo bien. Una vez esté ligeramente espesa la salsa, retirarla del fuego. No hay que dejarla que espese mucho, porque al enfriarse se irá espesando más. 
• Reservar en una salsera y dejar que se enfríe a temperatura ambiente.

Observaciones:

○ La maizena es un espesante que ayuda a dar consistencia a las natillas. Se puede modificar (disminuir o aumentar) la cantidad de la maizena según se prefiere, y así conseguir unas natillas de consistencia más liquida o más espesa.

○ Las natillas son base de muchísimos postres. Una vez preparadas se pueden servir en copas o como acompañamiento de bizcochos y helados (tipo salsa), incluso como cobertura o relleno de tartas.

○ Una vez esté lista la salsa de toffee, antes de dejar a que se enfríe, se puede colar para eliminar la espuma que se haya formado durante la cocción.

○ La salsa toffee queda deliciosa sobre frutas frescas o asadas, cremas, crepês,  helados, etc. 

○ Cuanto más frío esté el toffee más consistente será su textura. Una vez frío, si lo queremos más líquido solo hay que calentarlo un poquito en el microondas.

○ El toffee se conserva perfectamente en la nevera durante una semana.

Animaros a prepararlas, en nada de tiempo conseguimos elaborar un postre de lo más rico.

Hasta la semana que viene, os espero por aquí!!!

Besos!

Biljana