Delicia de chocolate

Perdida, completamente perdida...sí, esta sería la frase o la palabra correcta para explicar este tiempo de ausencia en el Blog. Disculpadme, pero varios compromisos tanto familiares como profesionales, me han tenido alejada de vosotros y de este espacio, mi dulce rincón, que tanto me gusta.

Todavía estoy liada con cosas y no podré dedicarle todo el tiempo al Blog como antes o como me gustaría, pero vengo por lo menos para dar señales de vida, para que sepáis que estoy bien y que no me he olvidado de vosotros. Eso si, volveré, la idea es seguir por aquí con la misma frecuencia o intensidad que antes, en cuanto me sea posible.

También os tengo que confesar que estoy a dieta, bueno, llevo un tiempo ya siguiendo una dieta o mejor dicho, aprendiendo a comer sano y aunque este no es el principal motivo de mi repentina desaparición, debo decir que es uno de los motivos. Porque yo soy así, yo no puedo estar a dieta y hacer dulces porque me los como y la dieta se iría a la porra, vamos que no me resisto ver dulce y no comérmelo, es mi debilidad. Y estos últimos años me había relajado bastante no sólo con los dulces sino con la comida en general y creo que ya está bien, hasta aquí hemos llegado, hay que hacer algo...y cuanto antes mejor. 

De momento lo llevo bastante bien, eso si, en casa todos están a dieta jajaja...una sola no se puede sacrificar, ¿verdad? Aquí todo el mundo tiene que colaborar y apoyar. 

Mi hija pequeña el otro día me dijo que echa de menos su madre repostera y los dulces de su mami, así que en plan nostálgico me puse manos a la obra y le preparé unos brownies de oreos. Puedo decir que es el único dulce que he hecho en los últimos dos meses, si si, no me lo creo ni yo.

A ver si puedo sanear pronto mi tiempo libre (aunque no todo depende de mí), aprender a controlar mi ansía hacía los dulces y puedo ir elaborando, e ir trayéndoos recetas ricas. De momento os dejo esta receta, facilita de hacer, que preparé hace tiempo, pero que no me había dado tiempo a traérosla todavía.

El título de esta receta no puede ser más acertado, "delicia de chocolate", madre mía que ricura de receta y de bizcocho. Porque esta delicia es esto un bizcocho de chocolate cubierto con glaseado de chocolate. Como puede ser una cosa tan simple despertar tan profundamente los sentidos. Pensaréis que estoy loca o que estoy exagerando demasiado, pero en serio, si en la sencillez está la clave y el éxito, desde luego esta receta es todo esto.

Este es uno de mis bizcochos de chocolate favoritos, o mejor dicho uno de nuestros bizcochos de chocolate favoritos, ya que en casa nos encanta a todos. Para mi gusto lo tiene todo, sabor, aroma y textura inmejorable, es jugoso, suave y sabe a chocolate, mmmm... ¡se me hace la boca agua!
Es un bizcocho con personalidad, aunque si lo ves en una mesa puede que no te llame mucho la atención, pero nada más probar el primer trozo, sabes que va a ser uno de estos bizcochos que vas a repetir en muchas ocasiones. ¡Es puro amor, lo tenéis que hacer!

Lo más importante en esta receta es respetar los pasos de la preparación y el mezclado. Todo se tiene que mezclar o incorporar delicadamente y con movimientos envolventes. Si tratáis la masa con cariño y mucho amor os aseguro que disfrutaréis de esta delicia en su máximo esplendor.

Animaros y luego me contáis, veréis que este bizcocho lo tiene todo para que se convierta también en uno de vuestros bizcochos de chocolate favoritos :).

Receta

Delicia de chocolate 

(para molde cuadrado de 18 cm)

Ingredientes para el bizcocho:

6 yemas de huevo L

130 gr de azúcar blanco

4 claras de huevo L

60 gr de harina de uso común 

30 gr de cacao puro en polvo sin azúcares añadidos (yo Valor)

50 gr de avellanas (o almendras) molidas

60 gr de mantequilla sin sal

Ingredientes para el glaseado:

150 gr de chocolate negro 70% de cacao (yo Valor)

150 ml de nata para montar

30 gr de miel

Preparación bizcocho:

• Precalentar el horno a 175ºC - 180ºC.
• Engrasar con mantequilla y forrar con papel de horno un molde cuadrado de 18 cm.
• Tamizar juntos la harina y el cacao. Añadir las avellanas molidas, mezclar y reservar.
• Derretir en un cazo o en microondas la mantequilla. Dejar templar.
• Batir las claras a punto de nieve con 50 gr de azúcar hasta que estén bien firmes. Reservar.
• Batir las yemas de huevo con los 80 gr de azúcar restante hasta que la mezcla blanquee y esté esponjosa, e incorporarlas a las claras batidas con movimientos envolventes.
• Incorporar delicadamente, en 3 veces, la mezcla de harina y cacao a la preparación de claras y yemas.
• Por último añadir la mantequilla derretida y templada.
• Verter todo en el molde y hornear durante 25 minutos aproximadamente, o hasta que al introducir un palillo en el centro del bizcocho, éste salga limpio.
• Dejar enfriar unos minutos, luego desmoldar sobre una rejilla y dejar enfriar por completo antes de glasear.

Preparación glaseado de chocolate:

• Trocear muy fino el chocolate y ponerlo en un bol grande.
• Llevar a ebullición en un cazo la nata y la miel, y verter sobre el chocolate troceado.
• Dejar reposar unos minutos y luego mezclar bien con unas varillas de mano o hasta que la mezcla esté completamente homogénea.
• Dejar templar a temperatura ambiente.
• Con una espátula flexible extender el glaseado sobre la superficie del bizcocho.
• Decorar a gusto y servir de inmediato o esperar una hora para que el glaseado cuaje bien.

Imprimir receta

Nota:

○ Para que las claras se puedan batir bien es muy importante que todos los utensilios que vamos a utilizar a la hora del batido estén limpios, sin humedad y sobre todo libres de grasa.

○ Para elaborar esta receta hay que utilizar cacao puro sin azucares añadidos como el de la marca Valor, no nos sirve el Cola - Cao o el Nesquik.

○ Este bizcocho se conserva muy bien durante varios días.

Espero que os haya gustado la receta. Hasta la próxima, gracias por estar ahí!

Besos!

Biljana